¿Las preguntas en el desarrollo? ¿Capacidad de razonar?
Una de las mejores maneras de enseñar de forma dialogada es animar a los chicos a que hagan preguntas, y que los “grandes” sigamos el ejercicio de repreguntarse sobre lo aprendido, ya que todos “llevamos un niño dentro” ¿no?
Suele decirse que los niños son preguntones por” naturaleza”. Ellos tienen que aprender el modo de adaptarse a un medio complejo y en continua transformación. Pero que sigan haciendo preguntas va a depender en buena parte de la forma en la que los adultos respondan a sus preguntas.
La capacidad de formular preguntas y de saber contestarlas es una parte fundamental de la inteligencia, podría incluso considerarse como la más importante. Se trata de una aptitud que podemos fomentar o reprimir.
Lev vygotski (1978) manifestó que uno de los principales medios a través de los cuales desarrollan la inteligencia las personas es la internalización, mediante la cual nosotros incorporamos en nuestro interior aquello que absorbemos del entorno.
Reuven Feuerstein (1980) se refiere a uno de los principales ejemplos de este proceso como a una experiencia de aprendizaje mediatizada, mediante la cual los padres, actuando como profesores, ayudan al niño a que comprenda el medio en el que se encuentra proporcionándole una orientación sobre su interpretación. Feuerstein afirma que los niños que presentan una capacidad intelectual deficiente suelen ser con frecuencia aquellos que se han visto expuestos a una mediación insuficiente de sus experiencias de aprendizaje.
Por ejemplo desde este punto de vista, no es suficiente con llevar al niño a un museo o a visitar lugares de interés. Lo realmente importante es la intermediación de la experiencia para el niño por parte de los adultos.
En términos piagetianos (1972), dicha intermediación contribuye a que los niños asimilen las experiencias nuevas en los esquemas ya existentes y a que acomoden experiencias más novedosas mediante la formación de nuevos esquemas. Cuando los niños buscan este tipo de mediación formulando preguntas, los padres, los profesores o formadores tienen una forma de responder característica.
En otras palabras, la idea fundamental es que los intermediarios que responden a las preguntas en uno de los niveles superiores, generalmente los padres o los profesores, resultan ser mucho mejores a la hora de fomentar el desarrollo intelectual de los niños. Además, una vez que han comprendido esta idea fundamental, los intermediarios pueden ponerla en práctica de forma inmediata.